Tomates, morrones y berenjenas: ¿en qué macetas plantarlos?
Descubre cómo un simple recipiente puede marcar la diferencia entre cosechas abundantes y plantas debilitadas.

La huerta en macetas es cada vez más popular. No es para menos, ya que permite cosechar alimentos frescos en patios, balcones y terrazas, sin necesidad de contar con grandes espacios. Pero para que los tomates, los morrones y las berenjenas se desarrollen bien, la elección del recipiente es primordial.
Macetas para tomates, morrones y berenjenas
En general, podríamos decir que tanto los tomates como los morrones (pimientos) y las berenjenas crecen bien en macetas de unos 25 litros, y cuya profundidad sea de unos 40 cm. Tengamos en cuenta que cuanto más grande sea el contenedor mejor crecerá la planta.
Es importante recordar que estas plantas requieren un sustrato rico en materia orgánica, que permitan un buen drenaje y que no les falte humedad -evitar el encharcamiento-. Se debe controlar también que los contenedores tengan varios orificios de drenaje.
Cuando la planta haya crecido unos 20 cm, conviene comenzar a tutorarla para evitar que el peso de los frutos quiebre sus tallos. Cuando estos se atan, al tutorar, no deben ajustarse para evitar lastimar la planta, y a fin de que esta tenga lugar para crecer.
¿Dónde ubicar las macetas?La disposición ideal es a pleno sol. O, en su defecto, en un lugar donde las plantas reciban al menos medio día de sol directo. Además, deben estar protegidas de vientos fuertes.
Con estos cuidados, incluso en espacios reducidos, es posible disfrutar de una
minihuerta urbana. Estén seguros de que les regalará la satisfacción de cosechar sabrosos tomates, morrones y berenjenas. Todo listo para pasar del espacio verde, a la cocina y ¡al plato!