Huerta: cómo prolongar la producción

Para lograr que la huerta tenga una producción duradera, es esencial planificar las siembras de manera escalonada. Esto significa identificar no solo el momento ideal para sembrar, sino también, conocer los períodos alternativos de siembra para cada planta. Así, se asegurará una producción continua durante todo el año.
El monitoreo del cultivo va más allá de simplemente asegurar que las plantas reciban suficiente agua o cosechar en cuanto estén listas. Implica realizar tareas de mantenimiento: eliminar las partes dañadas de las plantas, por ejemplo, así como las hojas quebradas, y revisar regularmente en busca de posibles plagas o enfermedades.
Regar con criterio es fundamental. Asimismo, es importante conocer las necesidades hídricas de cada planta y agruparlas conforme a ese criterio. Se recomienda regar preferentemente por la mañana o al atardecer, ya que, hacerlo al mediodía, cuando el sol está más fuerte, puede favorecer la aparición de enfermedades. Además, se debe procurar no mojar las hojas de las plantas durante el riego.
Proteger las hojas del sol excesivo es otra tarea clave. Puede lograrse usando mallas de sombra, disponibles en viveros y ferreterías, que pueden sujetarse con listones de madera formando una especie de techito sobre el área a resguardar. Este sombreado ayuda a evitar el estrés de las plantas y promueve un crecimiento saludable.
Finalmente, cosechar en el momento apropiado es crucial para la producción. Asimismo, recoger los frutos a tiempo permite que la planta concentre sus energías en producir mayor cantidad de partes comestibles. La cosecha oportuna asegurará la calidad de los productos y, al mismo tiempo, una producción continua.
Siguiendo estos consejos, tu huerta podrá mantener una producción sostenida y saludable, a la vez que posibilitará aprovechar al máximo cada temporada de cultivo.